Tutela de un adulto
Una tutela de un adulto es cuando un juez designa a otra persona para que actúe o tome decisiones en nombre de la persona que necesita ayuda. La persona que designa el juez se llama tutor de un adulto. La persona que necesita la ayuda es el pupilo. Un juez solo puede nombrar a un tutor de un adulto si otras opciones menos restrictivas no funcionan.
Encuentre recursos legales y de servicios sociales
Obtenga información sobre recursos legales gratuitos y de bajo costo y programas del gobierno que puedan ayudar.
Tutelas de un adulto
Una tutela de un adulto es un caso legal en el que un juez nombra a una persona u organización responsable (llamado “tutor”) para que cuide a otro adulto (llamado “pupilo”) que no se puede cuidar a sí mismo o manejar sus propias finanzas.
Debido a que las personas necesitan diferentes niveles y tipos de ayuda, existen diferentes tipos de tutelas de adulto.
- Tutela de adulto general: Una tutela de adulto en la que el tutor tiene todos los poderes y responsabilidades, excepto los que se consideren innecesarios.
- Tutela de adulto limitada: Una tutela de adulto donde los poderes del tutor están estrictamente limitados a hasta 7 poderes específicos basados en las necesidades del pupilo.
Con cualquier tipo de tutela de adulto, el tutor puede manejar solo el cuidado de la persona o también puede administrar sus finanzas.
- Si son responsables del cuidado y la protección de una persona, se llama tutela de la persona.
- Si administran las finanzas, se llama tutela del patrimonio.
Si alguien necesita una tutela de la persona y del patrimonio, un juez puede designar a una persona para que esté a cargo de ambas o pueden ser personas diferentes.
Los 7 poderes en una tutela limitada
Un tutor limitado puede tener hasta 7 poderes:
- Arreglar la residencia del pupilo o vivienda específica
- Acceder a los registros y documentos confidenciales del pupilo
- Dar o denegar el consentimiento al pupilo para casarse
- Ejercer el derecho del pupilo de celebrar un contrato
- Dar o denegar consentimiento médico en nombre del pupilo
- Ejercer o limitar el derecho del pupilo para controlar los contactos y las relaciones sociales y sexuales
- Tomar decisiones sobre la educación del pupilo
En una tutela limitada, el juez primero decide si una persona con una discapacidad del desarrollo necesita una tutela de adulto. Si el juez decide que sí, tiene que considerar si la persona necesita ayuda en cada una de las siete áreas de la vida cubiertas por los siete poderes. El juez podrá otorgar al tutor limitado únicamente los poderes que se soliciten y los que la corte determine necesarios. Tiene que ser el tipo de asistencia necesaria menos restrictiva para ayudar a que una persona con una discapacidad del desarrollo pueda llevar una vida de su elección. Ese requisito continúa incluso después de que un tutor sea designado.
Antes de solicitar que se inicie la tutela de un adulto
Necesitar ayuda no es suficiente para justificar que se designe un tutor. Un juez solo puede designar un tutor si puede demostrar que es necesario para mejorar y proteger el bienestar de la persona. La tutela de un adulto tiene que estar diseñada para fomentar la máxima autosuficiencia e independencia del pupilo.
Si no lo ha hecho aún, explore algunas opciones. Si solicita ser tutor de un adulto, tendrá que explicar por qué algunas de estas no funcionarán en su situación.
Si desea información o asesoría sobre tutelas de adultos del patrimonio o generales, hable con un abogado.